La gama Gravel de Reynolds incluye dos juegos de ruedas distintos — ATR y G Series — que ofrecen rendimiento premium, fiabilidad y versatilidad. Ambos modelos tienen una construcción tubeless recta con 25 mm de ancho interno, compatibles con neumáticos desde 30 mm. Aunque comparten la misma base de calidad y diseño, están adaptados a diferentes preferencias y condiciones de uso. La G Series es ideal para terrenos técnicos, mientras que la ATR se adapta mejor a largas distancias y carretera. La elección depende de cómo y dónde montas.
La G Series está diseñada para ciclistas que recorren terrenos técnicos y exigentes, priorizando la flexibilidad, el control y la comodidad. Su perfil más bajo se adapta bien a neumáticos grandes y destaca en senderos sueltos, pedregosos o impredecibles. Para quienes buscan una conducción precisa y fluida en terrenos desafiantes, la G Series ofrece una plataforma confiable y equilibrada, ideal para salirse de los caminos tradicionales.
En cambio, la ATR está pensada para quienes alternan entre asfalto y gravel o buscan velocidad en carreteras abiertas. Con un perfil aerodinámico optimizado para la eficiencia y la rapidez, es la opción ideal para ciclistas competitivos o para quienes recorren largas distancias a ritmo constante. La ATR combina la reactividad típica de la carretera con capacidad todoterreno, convirtiéndose en una auténtica rueda polivalente para quienes exigen rendimiento en una amplia variedad de superficies.
Elegir entre la G Series y la ATR depende de dónde — y cómo — montes. Ambos juegos de ruedas representan lo mejor de la ingeniería Reynolds, brindando la confianza necesaria para enfrentar cualquier aventura con rendimiento a medida.